Kaede tiene una vida feliz con su marido, excepto que su marido tiene disfunción eréctil. Desde que se casó, Kaede nunca ha estado sexualmente satisfecha. Esta vez se fue de viaje de negocios con el jefe del departamento. Después del trabajo, ambos fueron invitados por sus parejas a tomar una copa. Debido a su poca tolerancia al alcohol, Kaede rápidamente se emborrachó y tuvo relaciones íntimas con su jefe. No sabía que este jefe había estado apuntándola durante mucho tiempo. Aprovechó esta oportunidad para poseerla. Intentó emborracharla, reservando deliberadamente sólo una habitación para que pudieran dormir en la misma habitación. Cuando ella ya no estaba lo suficientemente consciente como para resistirse, ¡¡¡se hizo cargo de ella!!! Pero el sentimiento de felicidad que trajo hizo que Kaede se olvidara de todo. Un sentimiento que no había disfrutado en mucho tiempo. Ella ya no se preocupa por su marido, no responde a sus llamadas telefónicas, sino que sólo intenta servir al jefe del departamento, esperando que él satisfaga sus deseos sexuales durante toda la noche...
